Un valenciano premiado en la Exposición Universal de Filadelfia de 1876
En 1876, Estados Unidos celebraba el primer centenario de su Independencia con una Exposición Universal que daba la bienvenida a todos los países del mundo que quisieran exhibir su tecnología, su industria, su agricultura, sus artes, etc. Una empresa de Ontinyent, dedicada a la fabricación de papel de fumar, consiguió el primer premio en su categoría.
El Real decreto de 20 de noviembre de 1850 regulaba la concesión de marcas de los productos de fábrica en España. Los fabricantes debían solicitar a los gobernadores de sus respectivas provincias la expedición de certificado de marca, que sería el equivalente a la marca comercial actual.
En el archivo de la Diputación de Valencia, dentro de los expedientes relacionados con Industria y comercio, se conservan algunos sobre la tramitación de estos certificados.
Uno de ellos es el de Rafael Comas Delgado, vecino de Ontinyent, que cuenta con una «Fábrica y taller de libritos de papel de fumar» de hilo puro, puestos a la venta bajo el nombre de «Fuente Valenciana».
En 1858, Rafael Comas solicitó la certificación de marca para sus libritos de papel de fumar. En 1859 vuelve a solicitarla, subsanando unos errores, y por fin se le concede.
La imagen de la marca representa una fuente de donde surge el agua, y la leyenda «Fuente Valenciana»
Este fabricante presenta su papel en la Exposición Universal de Filadelfia, donde obtiene el primer premio, pues, según aparece en el diario La Correspondencia de España, “de su análisis químico resultó estar elaborado con solo los materiales de trapo y agua, y que bajo las marcas de la palma y fuente valenciana tenía ya gran crédito en esta corte”